Para ir conociendo el Tren de las Sierras


Pronto, el sábado 30 de agosto, estaremos realizando una caminata fotográfica muy esperada, y muy particular: llegaremos a la localidad de Cosquín abordando el Tren de las Sierras. Para ir conociendo más, aquí te cuelgo algunos datos interesantes sobre el Tren y su recorrido.



¡Pasajeros... al tren!

En total se recuperaron 52 kilómetros del viejo recorrido del Tren de las Sierras, que une la ciudad de Córdoba ahora con Cosquín, y en una próxima etapa con Cruz del Eje.
Una mirada distinta, lejos de la autovía, desde las entrañas serranas.

María Navajas (Especial)

En agosto de 2007, el Tren de las Sierras volvió a recorrer los paisajes serranos, y si embargó de nostalgia a los mayores, lo hizo de entusiasmo a los más jóvenes. Aunque en esa oportunidad se rehabilitaron sólo 16 kilómetros, hasta La Calera, su regreso devolvió la esperanza a numerosos pueblos que despertaron al desarrollo a través del tren.
El pasado viernes 4 de julio se sumaron 36 kilómetros más y ahora llega a Cosquín para en una próxima etapa arribar a Cruz del Eje como abarca el original ramal A1.
El tradicional convoy ligado a las vacaciones tradicionales de muchas generaciones de cordobeses y de otras tantas de turistas de otras provincias, abarca en la actualidad 52 kilómetros que cubre en una hora y media.
Para la puesta en marcha hubo de readecuarse la infraestructura (saqueada por años de desidia y abandono) de vías con reemplazo de durmientes, mejoras en los pasos a nivel y colocación de barreras comandadas y señalamiento.
Del mismo modo debieron recuperarse puentes y construir nuevos andenes elevados con accesos para personas con movilidad reducida necesarios para operar las duplas con piso alto que prestan el servicio y finalmente, remozar estaciones y apeaderos.

Estación de los recuerdos.

La emoción de algunos se mezcla con la expectativa de viajar de otros por primera vez en tren y el silbato incentiva a pasajeros y testigos que, desde los andenes o rutas observan su marcha.
La primera estación, si se parte de Córdoba, es Argüello, donde arriba tras 10 minutos de marcha y luego es el turno de Dumesnil, pequeña población ubicada sobre la costa del río Suquía y junto a la ciudad de La Calera.
El desarrollo del lugar estuvo vinculado a la explotación de la cantera de Juan Minetti que cerró en la década de 1990. Hoy abandonadas, reclaman una restauración para un fin turístico cuando se arriba al dique Mal Paso, pausa fresca en ese enclave serrano.
Ya se divisa la estación del ferrocarril de La Calera.

La Calera.

El nombre de la hoy ciudad se inspiró en los grandes yacimientos de piedra caliza que abundaban en la región.
Dos construcciones de gran valor patrimonial histórico-arquitectónico exigen una puesta en valor: la capilla Vieja que data del siglo XVIII y perteneció a los jesuitas, y el Molino Doble que ya funcionaba en 1776.
Pocos minutos de viaje conducen a Casa Bamba, paraje serrano elegido en 1897 para montar la Usina Bamba, primera Central Hidroeléctrica de la Argentina.

San Roque.

Corrían las últimas décadas del siglo 19 y la estancia Santa Leocadia ocupaba un amplio perímetro de las tierras de Punilla en vecindad a la antigua capilla San Roque, patrono de la pedanía. La pujante explotación agrícola ganadera del valle reclamaba un sistema de producción y distribución de agua potable.
Los estudios de aprovechamiento del cauce de los ríos Suquía y sus tributarios Cosquín y San Roque, demostraron que era esa la zona clave para construir el lago. Así, las aguas del dique cubrieron estancia y capilla. Ese fue el punto de inflexión que marcó la segunda etapa de la historia del paraje San Roque, ligado a la construcción del paredón que debía contener el embalse.
En la actualidad un mirador con las banderas de todas las provincias argentinas conforman la Plaza Federal.

Santa María de Punilla.

El Hospital Santa María de Punilla fue el primero en su tipo de Latinoamérica y fue creado en 1900. Atendió a enfermos de tuberculosis y con afecciones respiratorias. En la actualidad, casi superada la enfermedad, el establecimiento puede ser recorrido a través de circuitos turísticos que repasan su valiosa historia.
También se recomienda visitar la capilla San Roque, construida en 1899, y las ruinas del Molino del Rosario de Punilla, baluartes del patrimonio histórico regional.

Cosquín.

A los pies del cerro Pan de Azúcar (Supaj Ñuñu, en lengua aborigen), de 1.260 metros de altura, y en un magnífico enclave se encuentra Cosquín. Nació como villa el 4 de agosto de 1876 y fue la primera en Punilla en obtener ese reconocimiento. En el siglo 19 muchas familias acomodadas adquirieron casas quintas en la zona que cobró impulso con el Hospital Santa María.

Sin embargo, el Festival de Folklore fue el que le dio notoriedad internacional como encuentro cultural popular. Mientras se perfecciona el servicio el tren reencauza su marcha a través de túneles que atraviesan el corazón serrano, se mira en las aguas del lago, y avizora en el horizonte regresar a Cruz del Eje.












































Fotos y textos extraídos de internet. www.flickr.com/photos/15611379@N04/1677694007/ y www.taringa.net