La fotografía en la literatura


(...)  "En la pensión encontró, por cierto, a doña Carmen en su ventana. La señora lo saludó. "Si hubiera llegado algo, me diría", pensó. "Ahí, en la ventanita, parece una foto encuadrada." Sintió, entonces, el impulso de fotografiarla. Este impulso de fotografiar en el acto lo que tenía delante, en ocasiones le resultaba cargoso. Lo había comentado con Gentile, que le dijo: "Es tu fuego sagrado. Esperemos que no se acabe nunca". (...)

Las aventuras de un fotógrafo en La Plata, Adolfo Bioy Casares